Del PC impersonal a aparatos de cuidado diseño. Microsoft quiere atraer a los creadores con sus nuevos portátiles con alma de tableta y potencia de sobremesa.
Una combinación complicada que han resuelto con brillantez. Tras una primera generación de Surface que sorprendió, Microsoft vuelve con una nueva hornada en dos tamaños, 13 y 15 pulgadas.
Surface Book 2 llegará al mercado de Estados Unidos el 16 de noviembre a un precio de 1,499 dólares.
Lo hacen con una batería de hasta 17 horas de duración, procesadores Intel de doble y cuádruple núcleo y un chip gráfico de Nvidia, algo poco habitual en este tipo de aparatos.
Este combinado, según los de Seattle, duplica la potencia del MacBook Pro y supera cinco veces la de su anterior modelo, la primera Surface. Aún no hay fecha de lanzamiento ni precios en otros países.
Panos Panay, responsable de esta división, pone el acento en la necesidad de ofrecer máquinas acordes a las exigencias del contenido del futuro, con la realidad aumentada como algo más que una tendencia pasajera.
“La necesidad de crear nunca ha sido tan relevante. Queremos que Surface inspire y promueva la creatividad”.
Y abrió la puerta a más novedades, “estas fiestas vamos a ver un rango de aparatos bien diseñados y con características de lo más diverso”. Confirma así la estrategia de la firma, crear aparatos inspiradores, aunque no sean necesariamente súper ventas, para invitar al resto de fabricantes a crear opciones para diferentes públicos.
Históricamente, Apple ha sido la opción preferida por diseñadores, maquetadores, publicistas y educadores. La edición de imágenes, vídeos y un sistema operativo con herramientas para dar un resultado llamativo sin apenas conocimientos, han sido una de sus armas para que los fieles de la manzana siguieran comprando Mac hasta en las peores épocas.
También han añadido un editor de vídeo con un gran componente de inteligencia artificial. Basta con escoger los cortes del vídeo para que en cuestión de segundos se tenga una composición del tono elegido: romántico, épico, deportivo… Si el resultado no agrada, se puede volver a remezclar o escoger un personaje que sea el protagonista de la trama. Sorprende por la cantidad de efectos especiales añadidos, desde rayos, a lluvia o fuego.