*Pérez Cuéllar come ansias

* Pavel rebusca entre piedras

* Ávila necesita vacaciones

* Senadores de 90 mil pesos

0
2

El senador electo por Chihuahua, Cruz Pérez Cuéllar, está sobre excitado, una década de fracasos lo sometieron a los mayores rigores imaginables para un animal político, ganarse la papa con el sudor de su frente, es comprensible que ahora exude dicha y felicidad por regresar a su hábitat, el parlamentarismo.

El lunes dictó una rueda de prensa, poco difundida, en la que ofreció las oficinas del senado para la representación de Chihuahua, entrevistarse con los secretarios del gabinete federal a efecto de conseguir recursos para Juárez y mostró magnanimidad, olvidando las viejas diferencias con Javier Corral, para que nada impida que juntos trabajen por Chihuahua.

Es un lagartón a tiempo completo, válida la forma en restregarle a su odiado compadre, el gobernador Corral, un triunfo electoral que lo sitúa a un paso del senado y enviar el mensaje de que trabajará mañana, tarde y noche para sucederlo en el gobierno. Entre compadres te veas, dicen que ofenderse es ofender al eterno.

Le ganan las prisas, excedido en su protagonismo se muestra bisoño y comete un error imperdonable en Morena: moverse sin autorización del caudillo. En ese partido sólo uno habla, los demás obedecen, como en adelante será en gobierno, donde debe incluir a los poderes Judicial y Legislativo.

Sereno, Cruz, habrá tiempo para tocar una y mil puertas buscando congraciarse con el gran tlatoani para conseguir la postulación anhelada, prematuro desbordar ansias sabiendo que López Obrador envió mensajes de que nadie en Morena debe prometer que“bajará recursos”, estribillo de los priistas más presuntuosos.

Para bajarlos están los nuevos jefes políticos, que en el caso de Chihuahua Loera siempre y cuando los autorice el presidente, pues a partir del uno de diciembre en éste país no se moverá la hoja de un árbol sin su soberana y sabia voluntad.

Las viejas formas del priismo están de vuelta y una de las más conocidas es no moverse antes de la foto. Cuestión de leer correctamente los signos de los nuevos tiempos.

Más por impulso de sobrevivencia que por convicción, Pavel Aguilar rebusca entre las piedras -debajo, sobre y a los costados- los votos requeridos para llegar al tres por ciento necesario que le permita conservar el registro estatal y acceder a las prerrogativas. Su esperanza es como golpear una roca y esperar que en vez de agua broten votos.

Las siglas del PRD, cuya franquicia local pertenece a Hortensia Aragón, la tía generosa, están por desaparecer no sólo en Chihuahua, sino en todo el país. Uno a uno los líderes de las últimas tribus renuentes a postrarse ante su mesías, pondrán en un lado la dignidad y se tragarán el orgullo y pedirán perdón.

El consejo sabio de un perredista en el retiro es que busquen la forma de pasar a Morena, en política el orgullo y la dignidad son lastre no impulso ¿Qué harán sin las prerrogativas estatales, si la política es el sustento? Todavía están a tiempo, Morena seguirá recibiendo militantes de otros partidos, así Martín Chaparro haya quemado las fojas de registro.

Aplaudible la terquedad de Pavel al impugnar la elección de diputados en la ciudad de Chihuahua, buscando los votos que lo acerquen al tres por ciento. Poco probable que prospere, en Chihuahua faltan choferes de ubers, Cruz podría decirles cómo inscribirse para la entrevista.

El doctor Ernesto Avila, Secretario de Salud por relaciones familiares con el alto panismo, necesita tomar vacaciones de urgencia. Su manejo mediático siempre ha sido de mediano a bajo -recuerden el episodio en Gómez Farías, cuando la crisis de inseguridad- pero en los días que corren está excedido.

Confesó que el gobierno de Peña quería detenerlo, por impuestos impago en la administración de Duarte, a fin de presionar a Javier Corral para que soltase a la “Coneja productiva”. Atisbaron una especie de intercambio de reos: me das a la Coneja y te regreso al doctor. Esas eran las sospechas que motivaron ampararse. Es su declaración, está debidamente documentada, nadie inventó nada.

Soltó otra: que personalmente no tiene ningún problema con Egro, la farmacéutica que reclama 20 millones de pesos a la Secretaría, pues los adeudos son del Ichisal, Pensiones y Hacienda, a él que lo esculquen, está libre de todo pecado.

¿Quién es el titular de la Secretaría de Salud? ¿De quién depende el Ichisal? Mejor debió decir que semanas atrás corrió al director administrativo de la Secretaría, un tal Raúl Ramírez, quién precisamente lo metió en problemas legales por el caso Egro. Mucho de fondo trae ese despido.

Es lo que hay en Salud, lo mejor sería pagar deudas y empezar cuenta nueva, así podrían abastecer a los hospitales de medicamentos, pues carecen hasta de los más elementales, no se diga el material de curaciones.

Hasta por humanidad deberían pedirle la oficina al doctor Ávila, un mal día sufre un infarto –nadie se lo desea, desde luego- y no alcanza a llegar a Cima, pues en los hospitales del estado atenderlo sería inútil, no hay con que curar un resfrío.

Ricardo Monreal y René Bejarano dijeron que los senadores recibirán 90 mil pesos mensuales de salario, en lugar de los 300 mil que acostumbraban en el régimen de la corrupción. Para lo que hacen sigue siendo mucho dinero, pero al menos frenan el escándalo.

A Cruz Pérez Cuéllar le vendrán de perlas, pues en los últimos años no vivió sus mejores momentos económicos, lo mismo que a la maestra Bertha Caraveo, que se movía en camión ¿Pero a Gustavo Madero?. Esperen tatito, hay niveles, Gustavo es de rancia nobleza, cómo que 90 mil pesos, hay días que gana más en sus negocios.

Tampoco es para cortarse las venas, el senador perdedor por el PAN siempre tendrá la opción de los moches, ahí es campeón indiscutido, sólo que ahora los negociaría con líderes de Morena que suelen ser difíciles con los extraños. Entre ellos se entienden bien, con ligas o sin ligas, pero con los de fuero son recelosos. Prefieren aguantar la risa a dejar testigos incómodos.