No sólo en El Paso se ha notado el incremento de autos con placas mexicanas en las gasolineras locales a raíz del aumento a la gasolina en México desde el 1 de enero.
Las también ciudades fronterizas de Brownsville, McAllen, Laredo (todas en Texas), Nogales, Arizona y Calexico, California han visto un súbito aumento de mexicanos que cruzan y compran gasolina más barata.
Funcionarios de las Cámaras de Comercio de estas ciudades aseguran que las estaciones de gasolina han notado el aumento de compradores mexicanos, y que de igual manera se ha reportado un aumento en el flujo de tráfico y los tiempos de espera en los cruces internacionales.
En algunas de estas ciudades, donde el precio de la gasolina fluctúa dependiendo del abasto y la demanda, resulta más barato cargar combustible que en México, a decir de los funcionarios.
La esperanza de los comerciantes fronterizos estadounidenses es que el precio de la gasolina se convierta en un “gancho” para que los residentes mexicanos crucen, y una vez de este lado, compren también alimentos, productos y servicios.
“Con el reciente aumento de las gasolinas muchos consumidores mexicanos están optando por cruzar la frontera y cargar combustible aquí en Estados Unidos”, dijo Olivia Aianza-Kramer, presidenta de la Cámara de Comercio de Nogales-Santa Cruz.
“Nos han informado de líneas de espera en las estaciones de gasolina y sólo el pasado fin de semana se presentaron retrasos de hasta una hora adicional en los puentes internacionales de entrada al país”, añadió Aianza-Kramer.
“Nuestros visitantes mexicanos que vienen por gasolina, almuerzan en restaurantes locales, van al banco y a la tienda incentivando la economía de la ciudad”.
Miguel Conchas, presidente de la Cámara de Comercio de Laredo, Texas, también confirmó un aumento en la compra de gasolina en las estaciones locales, especialmente las ubicadas en la Interestatal 35, vía que los viajeros mexicanos deben transitar de regreso a Nuevo Laredo y Monterrey, o que los lleva a ciudades del interior de Texas, como San Antonio y Dallas.
En McAllen, los comerciantes ya hablan de coordinar ofertas en diversos productos y servicios para aprovechar que algunos residentes de Reynosa, Tamaulipas vienen a cargar combustible.
“Muchos consumidores (mexicanos) tratan de cuidar su bolsillo cruzando la frontera”, dijo un funcionario, previendo una afluencia aún mayor de mexicanos si el precio de la gasolina en México sigue aumentando.
Por lo general, la gasolina en Brownsville es varios centavos de dólar más barata que en las bombas de combustible de Matamoros, Tamaulipas. Funcionarios de la Cámara de Comercio de Brownsville están a la expectativa de qué tanto va a continuar esta tendencia –que la gasolina salga más barata del lado estadounidense– con la esperanza de que el aumento de visitantes se vuelva permanente. (El Diario de El Paso)
