Jorge Ramírez tiene motivos sobrados para estar contento, no estaba en sus cálculos que la Comisión Jurisdiccional votase contra la propuesta del desafuero. Al rechazarlo por amplia mayoría le regresaron las esperanzas de seguir ejerciendo como magistrado y, lo principal, librarse de prisión.
Sin embargo una actitud sensata sería no destapar las botellas de champaña antes de tiempo. Prudencia, falta la prueba del Pleno y, por más que la Comisión haya decidido rechazarla, una mayoría simple de diputados es suficiente para retirarle el fuero y dejarlo a un paso de prisión.
En otras palabras, Ramírez sigue en la tablita y sinceramente dudo que se les escape, los odios de Javier Corral son legendarios y más tratándose de duartistas. Los trae atravesados y si por él fuese todos estaban en prisión.
Sólo imagine que el Pleno vote en sintonía de la Comisión o que simplemente dejen las cosas por la paz y no llamen al Periodo Extraordinario. Sería catastrófico para un gobernador al que todavía le falta más de un año y medio en el cargo. Se le pela Ramírez y pierde toda fuerza política, sería el hazme reír de todo Chihuahua.
Lo que más bien pienso es que el categórico rechazo de la Comisión Jurisdiccional encareció la negociación en el Pleno. Pongamos en los siguientes términos: Si Rubén Aguilar tenía pensado pedir otros cinco empleados –a sus recomendados los vacuna con hasta el 70 por ciento del salario- con la votación del viernes pedirá diez o veinte. Y así cada uno de los diputados, cada quién elevará su precio.
Es muy desgastante estar negociando desde una posición desventajosa, pero no pueden darse el lujo de perder en este caso. Como dije antes, si Ramírez se sale con la suya será el magistrado más empoderado que haya tenido el Tribunal y Corral objeto de burla. Ay nanita, los próximos serán días tensos.
Rompeolas
La violencia tocó al gobernador, el ataque de los sicarios contra sus escoltas es un mensaje estruendoso que, sin duda, alteró el submundo de policías y ladrones y puso a temblar a Peniche y sus querubines. Ellos saben que no es una casualidad, eligieron a los escoltas por alguna razón, iban específicamente por ellos, no por otros policías, se trataba de atentar contra los escoltas de Javier Corral. Trágame tierra, son días grises para el mandatario y se aproxima el informe de gobierno, días en que, se supone, la política debería sonreírle. Pero lo más grave es que la sociedad se siente desprotegida, temerosa, pensando que si eso le sucede a los policías responsables de la seguridad del mandatario, qué puede esperar un ciudadano común. Estamos llegando a la época negra de la guerra calderonista contra el crimen, cada vez escalan más los hechos de sangre.
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Una excelente iniciativa la de “Un día sin Mujeres”. El problema es que grupos de empoderadas con intereses ajenos al movimiento empiezan a pervertir la protesta con la usual politización mezquina. Es normal que López Obrador pretenda desactivarla –ya vio el fiasco de su esposa, sumándose al movimiento y reculando tres horas después- con el argumento insensato de que se trata de una expresión de los conservadores, a fin de cuentas es una protesta contra su gobierno. Pero que la manoseen senadoras y diputadas de diversos partidos no se vale, deben dejar que ese movimiento fluya natural desde la sociedad, pues de otra forma perdería legitimidad. También es un desacierto que instituciones públicas se “sumen” voluntariamente al paro, autorizando a las mujeres que falten. Se trata precisamente de un acto de poder, una protesta pública donde las mujeres, se supone, no necesitan pedirle permiso a nadie para solidarizarse con el movimiento. Ojalá que la iniciativa prospere, a pesar de esas manchas que empiezan a verse en los días previos.
