Incapaz de aceptar que se trata de un reclamo legítimo, de sentida preocupación por las habituales sequías que sufre la entidad, el presidente López Obrador optó por criminalizar a los agricultores movilizados en defensa del agua. Actitud vil, provocadora, la conducta de un pendenciero de barriada sabiéndose impune o protegido por sus compinches.
En sus reclamos los agricultores pueden tener o no razón, está de por medio el cumplimiento de un Tratado Internacional que data de 1944 y en consecuencia sujeto a discusión jurídica. Pero criminalizar el movimiento desde el poder y encima por motivaciones electorales, no puede sino considerarse una vileza. Ellos lucharon por lo que creyeron causa justa, en defensa del derecho a trabajar honradamente.
Javier Corral se declaró sorprendido por la declaración matutina del Presidente, cuando dijo que armas robadas a la Guardia Nacional en la Boquilla, aparecieron durante una redada contra miembros del Cartel Jalisco Nueva Generación, en Nayarit, manera de la cual el Presidente asoció a los agricultores de Chihuahua con el violento cartel del crimen organizado. Con frecuencia tiene uno dificultades para dar crédito a lo que escucha en las mañaneras.
Es inaudito, perversidad absoluta y más de quien se ha propuesto por principios rectores de su actuar “no mentir, no traicionar y no robar”, ofender así las legítimas exigencias de una comunidad formada en el arduo trabajo diario del campo. Si además reparamos en que no existe conocimiento de una denuncia por robo de armas en la Boquilla, como también aclaró el gobernador, la perversidad es doble, parte de una invención, un montaje, una tergiversación.
López Obrador está desubicado de la realidad, conoce la debilidad de su partido en la región y el impacto a escala estatal, de modo que se presta para intervenir tratando de revertir el descrédito de los candidatos de su partido y no se le ocurre más que criminalizando a los agricultores. Piensa que les hace un favor. Está equivocado, la reacción de la gente es de solidaridad absoluta con los agricultores movilizados.
No será ofendiendo a quienes decidió poner en la lista de sus adversarios, cada día más, como levantará la campaña de Loera. Pero dejemos que siga pensando en su poder hipnótico frente a los electores, seguro el seis de julio se llevará una sorpresa en Chihuahua.
Rompeolas
Escuchando la narrativa bravucona de Félix Salgado Macedonio, propia de una tepochoría en sábado a las diez de la noche, no puede uno sino pensar en que asistimos al vulgar espectáculo de un subproducto escatológico del autoritarismo populista. Para defender su reclamo ante los consejeros del INE, frente a mil testigos y cientos de cámaras amenazó de muerte a Lorenzo Córdova, presidente del organismo electoral. José Ramón Cossío, ilustre ministro en retiro y una de las pocas mentes brillantes que se han resistido al avasallamiento del Tlatoani, dijo que las amenazas de Salgado Macedonio merecen de tres meses a un año de prisión, citando el articulado de las leyes en la materia. ¿Cuál fue la reacción del Gobierno frente a la amenaza de muerte al más alto funcionario electoral del país? La secretaria de gobernación, Olga Sánchez Cordero, hizo un llamado a las dos partes –INE y FSM- para que se condujeran con respeto a la ley. ¡Puso en el mismo lugar al amenazador y al amenazado! ¿Y López Obrador? Guardó silencio, avalando las amenazas del rufián que aspira a gobernador de Guerrero, siendo sospechoso de violador serial. Son las estrellitas del nuevo régimen, para que vayan midiendo si consiguen empoderarse.
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No se, pero me huele a montaje la detención de Adriana Fuentes, candidato el PRI a la alcaldía de Ciudad Juárez. Y si me apuran en una de esas pudo hacerlo en acuerdo con el gobernador Javier Corral o, incluso, a recomendación del mismo. ¿Por qué digo lo anterior? En primera es por que Corral quisiese a Fuentes de alcaldesa en Juárez, estando Pérez Cuellar y González Mocken como adversarios de Adriana; en segunda por que vimos una manifestación absurda ¡Protestan deteniendo las maquinas que llevan meses de retraso en el carril confinado del transporte!, siendo que exigen conclusión de las obras. Por donde la vean no hace ningún sentido, pero así es la política, la gente suele volverse local con tal de conseguir adhesiones y simpatías electorales.
