Thalía ha sido demandada por EDF Brands, que es una compañía con la que tiene un contrato para promover productos en México.
Dicha compañia la acusa de ser toda una diva.
El acuerdo entre EDF y Thalía presuntamente solicitaba que la actriz acudiera a lanzamientos de productos en la Ciudad de México, y se le pagaría el viaje de avión desde Nueva York en primera clase, y alojamiento en hotel de cinco estrellas.
La compañía dice que le entregó un adelanto de 150 mil dólares por su trabajo, pero ella negó todo y contrademandó a la empresa. Ambas demandas piden pago de daños, aunque las cantidades no se han hecho públicas.Thalía alega que EDF anunció productos que llevaban su nombre pero no habían sido autorizados por ella, además de que no eran de la calidad deseada; incluso dice que dañaron su imagen al utilizar fotos manipuladas digitalmente sin su permiso.
«EDF llegó a sobreponer inexpertamente una imagen de la cara de Thalía encima del cuerpo de otra modelo con un tono de piel notablemente diferente», dice la demanda de Thalía.
