México podría conseguir otros proveedores de insumos para la industria manufacturera si desaparece el Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TCLAN).
Israel Morales, director del Comité de Comercio Exterior del Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación (Index), expuso que existen herramientas que puede utilizar el sector.
«México puede usar la figura de los Prosec (programas sectoriales) para que el costo de manufactura pudiese mantenerse de forma estable si se importan insumos de otros proveedores que no están en la cadena integrada de Norteamérica», dijo.
Aunque es extremo, los maquiladores están comenzando a analizar escenarios posibles si Estados Unidos sale el TLCAN.
«No es deseable, para nada, que se cambien las reglas del juego abruptamente o cancelar el tratado, pero si así fuera de entrada, México podría tener mejores maneras de lidiar con el cambio que Estados Unidos.
«El País podría ajustar los aranceles de manera unilateral para que el costo de manufactura pudiese mantenerse estable, competitivo», explicó en entrevista.
Previo a la 43 Convención Anual del Index, dijo que 85 por ciento de lo que este tipo de industrias producen se destina hacia Estados Unidos porque son corporativos estadounidenses los que se han instalado en el País para abastecer este mercado.
Un alza en los aranceles de importación causaría que los productos mexicanos fueran menos competitivos debido a un encarecimiento, pero no necesariamente se reduciría el nivel de demanda debido al patrón de consumo de los estadounidenses.
«El plan de Trump tiene un fallo: el nivel de consumo que acostumbran sus habitantes no puede mantenerse si los precios se encarecen de 30 a 40 por ciento más.
«Podría haber otros proveedores, como los países asiáticos, pero no necesariamente habría una sustitución perfecta porque por cuestiones de logística probablemente costarían lo mismo sus productos que los nuestros», sentenció.
Si bien, el discurso de Trump es crear empleos a partir de la construcción de nuevas plantas para sustituir importaciones, esto tampoco es completamente realista.
«Veintidós años de construir un enarbolamiento de la manufactura en Norteamérica no puede, ni debe, desmantelarse de la noche de la mañana», precisó.
De todos modos, Morales señaló que en el desarrollo de escenarios, también se contempla la posibilidad de actualizar el acuerdo como una cuestión positiva.
«El TLCAN es perfectible, se quedó corto porque hubo temas que no se incluyeron, como cuestiones de reciclaje y reintegración para la maquila, además que ya está rebasado en ciertas previsiones», puntualizó.
