Pablo Cuarón, exitoso empresario juarense dedicado al giro ferretero y Secretario Estatal de Educación, lamentó que padres de familia hayan tomado las instalaciones de las escuelas primarias Porfirio Parra y Jesús Reyes Heroles, por falta de docentes, a una semana de iniciado el ciclo escolar.
Peculiares las prioridades del señor secretario, en vez de lamentar la grave deficiencia de maestros y ocuparse en resolverla, se queja por la reacción de inconformidad presentada por los angustiados padres de familia, pues –dijo- además así ha sido siempre, por lo tanto le parece normal. Como antes sucedía, que más da hoy.
Su postura de simular el problema y recriminar a los ciudadanos que protestan, es similar a la que asumió César Augusto Peniche, Fiscal General del Estado, con relación a la “alerta” del Departamento de Estado Norteamericano, previniendo a sus ciudadanos de visitar Chihuahua, por causa de la violencia.
Peniche propone que esa información sea ocultada para que –según él- no cause trastorno en el turismo y la economía estatal; Cuarón quiere que ningún padre de familia exhiba las deficiencias del sistema que dirige, dado que al hacerlo envían un mensaje negativo a toda la sociedad.
En ambos casos las razones explicativas son las mismas: considerar que al negar o minimizar los problemas éstos quedarán resueltos. La vieja práctica del paisano cuando cierra los ojos mientras defeca al aire libre, porque así nadie lo ve. O la historia de avestruces que ante el peligro meten la cabeza en la arena, mito citadino de la sabana africana, dado que las señoriales aves corren ante el peligro en lugar de ocultar la cabeza.
Si no pueden resolver los problemas, menos malo sería correr cuando queden superados. Pero ningún político es avestruz, esa posibilidad no existe. En cualquier caso son dos ejemplos recientes e incontrovertibles de funcionarios del gobierno estatal, a cargo de Javier Corral, que optan por la simulación, en lugar de concentrarse en los desafíos.
¿Es la manera en que gobernará el Nuevo Amanecer durante los cuatro años que restan a la presente administración, ocultándose? La pregunta queda para el gobernador Corral, en él recae la responsabilidad de atender y resolver los problemas de la entidad y más en temas tan sentidos como Seguridad y Educación.
Durante diez meses el gobernador Javier Corral trató a los presidentes municipales, sin hacer distinción que fuesen del PRI o de su partido, como Carlos Salinas a los perredistas; “ni los veo ni los oigo”.
Para él simplemente no existía esa representatividad constitucional, pues a su ver muchos –aun siendo de su partido- fueron impuestos por Duarte y en consecuencia a su triunfo colocados en el cajón de los chihuahuenses intrínsecamente perversos y corruptos. La gente impura.
Ayer celebró un encuentro con los ediles del PRI, en el salón Rojo de Palacio, para dotar al encuentro de formalidad. Más vale tarde que nunca, son autoridades votadas por el ciudadano, recibieron la confianza de la gente en sus comunidades, por lo tanto merecen atención y respeto, mínimo. Falta la reunión con los de su partido.
No suponga usted que ese encuentro es producto del ecumenismo político observado en la superficie, desde que Omar Bazán y Corral se tomaron la foto en la oficina de Aldama y Nery Santos.
Desde la Dale soltaron el dato de que los alcaldes, desesperados por verse y sentirse desatendidos y dejados a la buena de Dios, buscaban coordinarse para organizar una pasarela en la Ciudad de México, con la sonaja de que acudían hasta allá –como lo platican es fácil imaginar que en actitud de menesterosos, para dramatizar el abandono- porque el gobierno local no los tomaba en cuenta.
Así que esa reunión fue más que todo un apretón de muñeca, manita de puerco para que el señor gobernador se dignase recibirlos ¿Implicaciones del encuentro? Se verán adelante, pero resulta inconcebible una reunión de tal naturaleza sin que cambie la relación, pues si Corral los ignoraba, los secretarios del gabinete los trataban con la punta del zapato.
No esperen que Fuentes Vélez abra la cartera y derroche generosidad, pero sería un avance que a partir de ayer al menos el “particular del particular” responda el celular y los anime con la ordinaria de “no se preocupe, señor alcalde, ya tomamos medidas, espere en su municipio las respuestas a su petición, que será a la brevedad posible, no queremos hacerlo venir hasta Chihuahua. Ya estamos trabajando, el señor secretario se disculpa, está muy ocupado en reunión de gabinete, el gobernador nos trae locos con tanto trabajo, -ajá- pero le manda sus mejores deseos y promete atenderlo en cuanto su agenda tenga un espacio. Buenos días”. Antes ni eso.
Al salir del encuentro el mismo Corral reveló que la reunión fue fructífera… para su gobierno, en razón de que el PRI –sin que los legisladores estuviesen presentes- se habría comprometido a votar la reestructuración de los 20.4 mil millones de pesos y el añorado Sistema Anticorrupción.
Buenos acuerdos, hace tiempo que las legisladoras priistas debieron aprobar esa reestructura, sabiendo que no representa más que un mejoral para las deprimidas finanzas estatales y el Sistema Anticorrupción tendrá que ser votado, tarde o temprano, en los términos planteados por el mandatario, es su prerrogativa.
A ver como regresa Javier Corral el piropo, pues la reciprocidad es, por definición, en doble vía. No se hagan ilusiones, señores alcaldes, podrían sufrir un desengaño.
Los amigos empresarios de Patricio Martínez empezaron a pasar la charola, al recibir el borrego de que el expresidente buscaba la presidencia, pero no de Chihuahua sino de la República.
Y no es broma, en las cámaras el chisme corre a todo lo que da, sólo que los más ingenuos están extrañados preguntándose cómo decidió prestarse a ser postulado por el EZLN ¿Todavía existe el membrete? Por lo visto sí.
Un comunicado de la organización clandestina nombró a Patricio Martínez vocera del Consejo Indígena y candidata por la vía independiente a la Presidencia de la República. Es correcto eso de “vocera” y “candidata”, pues se trata de la tzotzil María del Jesús Patricio Martínez, que nada tiene que ver con el patricio de Chihuahua.
El norteño busca hacer ruido dejando correr la versión de que Morena le hace ojos para candidato a la presidencia municipal. Hay diferencias, no se angustien ni entren en pánico, si el senador pasa la charola será de sobres menores, los cañonazos para la Presidencia del país están fuera de su alcance, esos sólo Duarte cuando estaba en plenitud de su poder, como dijo Fidel Herrera, un gañán veracruzano a tiempo completo.
