Rinden homenaje al escultor de origen húngaro Pál Kepenyes en México

La Embajada de Hungría en México, en cooperación con autoridades mexicanas, abrirá una exposición homenaje dedicada al escultor de origen húngaro, Pál Kepenyes (1923-2021), quien abandonó su patria en 1956 y residió la mayor parte de su vida en Acapulco, Guerrero, ciudad que consideró su segundo hogar, donde falleció y dejó su casa-taller.

La muestra, que abrirá mañana a las 11:00 horas en la Universidad Americana de Acapulco, incluirá una conferencia con expertos de arte de Hungría y del Cenidiap del INBAL, así como una ceremonia conmemorativa al pie de la escultura Pueblo del Sol y la proyección de los avances del documental que realiza Luis Vargas sobre Kepenyes, en el marco de la Semana de la Cultura Húngara en México.

Pál Kepenyes fue una gran figura de la cultura húngara y mexicana por- que, además de ser un gran escultor y orfebre, vivió gran parte de su vida en México y, por muchos, ha sido considerado el Picasso de la escultura”, detalló a Excélsior Zoltán Németh, embajador de Hungría en México.

Recordó que luego de la revolución húngara de 1956, el artista fue obligado a emigrar y, después de vivir una temporada en París, vino a radicar a Acapulco y luego de exhibir su trabajo por todo el mundo recibió el premio Kossuth, la máxima condecoración húngara que se puede otorgar en el ámbito artístico en Hungría.

Para nosotros es un símbolo de la coexistencia entre ambos países, porque se convirtió mundialmente famoso en México, pero mantuvo sus raíces húngaras y todo su arte refleja la combinación de elementos del arte popular húngaro, precolombinos y del surrealismo”, apuntó Zoltán Németh.

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