La a Policía Nacional Civil de Guatemala dio a conocer que la detención de Javier Duarte de Ochoa se logró hasta el sábado 15 del presente, debido a la falta de una orden de captura con fines de extradición por parte del gobierno mexicano.
El director general de la Policía Nacional Civil de Guatemala, Ery Ramos y Ramos, indicó que fue una notificación verbal que hizo la Cancillería mexicana a su gobierno y fue como se empezó a gestionar y a ubicar al exgobernador de Veracruz.
La alerta indicaba que había un vuelo de avión de Toluca con destino a Guatemala donde se supo que la familia de Duarte de Ochoa se reuniría con el hoy detenido.
“A partir de ese momento no se tenía una orden de extradición; es el día sábado cuando ya se determina el lugar donde ya se refugia la familia. Se tiene un avistamiento del señor Duarte que se gestiona ante el Ministerio Público y un juez en turno esa orden de captura con fines de extradición”.
Incluso, la información fue clasificada tipo “A”, y es así como la Policía Nacional empezó a mover sus estrategias de investigación en contra del exgobernador de Veracruz.
Asimismo, indicó que al momento de ser aprehendido Javier Duarte no se identificó con su nombre, pero no logró engañar a la Policía Guatemalteca.
El canciller de Guatemala, Carlos Raúl Morales, ofreció la colaboración de su gobierno para agilizar la extradición de Duarte, mientras evalúa aplicar la Ley de Extinción de Dominio en favor del Estado mexicano, si se comprueba que el exgobernador compró propiedades en Guatemala.
El ministro de Relaciones Exteriores aseguró que se mantiene una estrecha colaboración con autoridades mexicanas, lo que permitió la localización y captura de Duarte el sábado pasado, cuando se ocultaba en un hotel del municipio de Panajachel, departamento occidental de Sololá.
Por otra parte, la fiscalía guatemalteca abrió ayer un expediente para investigar la red de personas que habrían ayudado a Duarte a movilizarse por Guatemala, donde estaba escondido de la justicia de su país.
La fiscal general de Guatemala, Thelma Aldana, confirmó que el siguiente paso será escuchar la declaración del guatemalteco Juan Eduardo Barillas Canella, un hombre de 53 años cuya identidad salió a luz pública en días pasados por acusaciones de haber prestado sus propiedades a Duarte para refugiarse.
Aldana explicó que la fiscalía guatemalteca no sabía nada sino hasta el 15 de abril, cuando recibió de la Cancillería la solicitud verbal de la Procuraduría General de la República de México sobre la petición de extradición.
