Hace dos décadas, los fanáticos de la televisión vivieron un momento agridulce. El 6 de mayo de 2004, en Estados Unidos, se transmitió el último episodio de «Friends», marcando el fin de una era para la exitosa serie de comedia que durante diez temporadas capturó los corazones de millones. «Friends», desde su inicio en 1994, no solo fue un fenómeno en la televisión, sino que también se convirtió en un elemento cultural que definió a una generación.
El capítulo final, titulado «The Last One», fue seguido por aproximadamente 52.5 millones de espectadores solo en Estados Unidos, convirtiéndolo en uno de los finales de serie más vistos de la historia. El episodio mostró a los seis amigos —Rachel, Ross, Monica, Chandler, Joey y Phoebe— enfrentando grandes cambios en sus vidas, cerrando ciclos y empezando nuevos capítulos, un reflejo perfecto del crecimiento que cada uno experimentó a lo largo de los años.
Además de ser un éxito de audiencia, «Friends» ha dejado un legado duradero en el mundo del entretenimiento. La serie lanzó a la fama a sus seis protagonistas, y también estableció un nuevo estándar para las comedias de situación, con su ingenioso guion y química inigualable entre los actores.
Hasta la fecha, sigue siendo relevante gracias a las repeticiones y plataformas de streaming, donde nuevas generaciones continúan descubriendo y enamorándose de las desventuras y alegrías de este grupo de amigos en Nueva York.
Al mirar hacia atrás, es claro que «Friends» fue más que solo una serie de televisión; fue un fenómeno que capturó la esencia de la amistad y la vida adulta con humor y calidez. Aunque han pasado 20 años desde que se emitió el último episodio, el impacto y el cariño que sigue generando entre los fans de todas las edades son prueba de que, efectivamente, esta serie ha dejado una huella imborrable en la cultura popular.
A 20 años del adiós a ‘Friends’: ¿Dónde están ahora los protagonistas?
Dos décadas después del final de «Friends», los seis actores que encarnaron a los icónicos personajes de la serie han seguido caminos diversos en la industria del entretenimiento. Aquí hacemos un repaso de sus trayectorias:
Jennifer Aniston (Rachel)
Tras decir adiós a Rachel, Jennifer Aniston no perdió el ritmo y continuó siendo una figura prominente en Hollywood. Aunque es conocida por sus roles en comedias románticas como «Una pareja de tres» y «Love Happens», uno de sus éxitos más grandes fue «Somos los Miller», donde compartió pantalla con Jason Sudeikis y Emma Roberts. La película fue tan exitosa que se rumoreaba una secuela. Más allá del cine, Jennifer ha participado en proyectos televisivos aclamados, incluyendo la serie «The Morning Show», por la cual ha recibido elogios críticos y premios, consolidando su lugar como una estrella de calibre tanto en cine como en televisión.
Courteney Cox (Mónica)
Courteney Cox, recordada por su papel de Mónica, ha mantenido un perfil alto en la televisión después de «Friends». Protagonizó «Cougar Town», que le valió una nominación al Globo de Oro, mostrando su habilidad para liderar una comedia de situación. Además, Courteney ha retornado a su querido género de terror con su participación recurrente en la saga «Scream», apareciendo en la última entrega que se estrenó en 2022. También ha explorado roles detrás de cámaras, dirigiendo y produciendo contenido.
Lisa Kudrow (Phoebe)
Lisa Kudrow, quien interpretó a la excéntrica Phoebe, ha tenido una carrera versátil post-«Friends». Participó en películas como «Malditos Vecinos» y mantuvo presencia en televisión con «Web Therapy», una innovadora serie que también produjo. Además, Kudrow participó en la revitalizada serie «The Comeback», que recibió aclamación crítica por su representación satírica de Hollywood. Lisa también ha mostrado su talento en documentales, produciendo y presentando «Who Do You Think You Are?», explorando genealogías familiares.
David Schwimmer (Ross)
David Schwimmer, el eterno Ross, ha tenido una carrera más discreta en comparación con sus coestrellas. Ha dirigido varios proyectos y ha actuado en teatro. Schwimmer también destacó en la aclamada serie «American Crime Story: The People v. O.J. Simpson», donde interpretó a Robert Kardashian, papel que le valió críticas positivas. Su carrera en dirección incluye trabajos tanto en teatro como en cine, demostrando su versatilidad más allá de la actuación.
Matthew Perry (Chandler)
Matthew Perry ha continuado su carrera principalmente en televisión con variado éxito. Tras «Friends», protagonizó «The Odd Couple», donde también trabajó como guionista y productor. Desafortunadamente, Matthew tuvo desafíos personales y de salud que no pudo superar.
Matt LeBlanc (Joey)
Matt LeBlanc, tras su intento de continuar el legado de Joey en el spin-off homónimo, encontró éxito con «Episodes», una serie que parodiaba la industria televisiva, por la cual fue nominado a varios premios importantes. Más recientemente, Matt se aventuró a ser presentador en el popular programa «Top Gear», ampliando su rango más allá de la actuación.
Este repaso muestra cómo cada uno de los protagonistas de «Friends» ha navegado su carrera post-serie, dejando una marca en diferentes áreas del entretenimiento y más allá. Aunque han seguido caminos distintos, todos han mantenido una presencia en la cultura popular, demostrando el duradero legado de sus personajes y la serie que los hizo famosos
N. de la R.: Es importante mencionar que el éxito de «Friends» no solo se mide en términos de audiencia televisiva o el impacto cultural directo a través de sus emisiones originales y repeticiones, sino también en su influencia en la industria del entretenimiento en formas más amplias. Por ejemplo, el modelo de negocios que «Friends» ayudó a solidificar en la televisión de los años 90, donde los contratos de sindicación y los acuerdos de licencia para retransmisiones se volvieron extremadamente lucrativos, ha sido un modelo para series subsecuentes. Además, el fenómeno de «Friends» ha sido estudiado en numerosos cursos de sociología y comunicación, destacando cómo la serie refleja y también modela las interacciones sociales y las expectativas culturales. Esto subraya cómo las producciones televisivas no solo son entretenimiento, sino también vehículos de influencia cultural y social extendida.
