Batido en sí mismo, el PRI sigue dando la nota de verguenza. En el colapso electoral sus liderazgos se despedazan discutiendo el asalto a la dirigencia nacional encabezado por Alejandro Moreno, el impresentable alito, y una pandilla de oportunistas avenidos a recibir las migajas del poder que les arroje el nuevo partido hegemónico.

Primero fue Dulce María Sauri, presidenta del partido durante la derrota del 2000, con Labastida, le siguió Aurelio Nuño, Beltrones, presidente en la derrota del 2018, con Meade. El día de hoy siguió Miguel Ángel Osorio Chong, exgobernador de Hidalgo, secretario de gobernación y frustrado candidato presidencial.

Cada quien en sus términos condena la maniobra de alito y su camarilla, cuyo fin es secuestrar el partido a perpetuidad. Están desenfocados, discutir con un barbaján de la política, un pendenciero envalentonado que insulta en vez de argumentar, es una absoluta estupidez.

Si quieren hacer algo por el PRI sólo tienen el camino de la legalidad, en el Tribunal Electoral es donde deben litigar, no en medios. Y aún en ese caso tengan presente que ahora alito es aliado del nuevo régimen, por lo tanto su protegido. Ellos mejor que nadie saben que contra un poder avasallador la llevan de perder. ¿Cuando los magistrados electorales han sentenciado asuntos relevantes sin recibir línea?.

La otra realidad en su contra se puede expresar con la sentencia bíblica de Jesús: “quien esté libre de pecado que arroje la primera piedra”. En el viejo, vertical (eufemísticamente le llamaban institucional) y corrupto PRI, nadie que haya ocupado cargos de importancia como ellos está libre de pecados.

Muy al contrario, todos tienen muertos en el closet y en algunos casos el panteón completo. Alito conoce sus muertitos o al menos algunos de ellos, por supuesto que los exhibiría. Aprendió del mejor, el que tiene su megáfono con cargo al erario y lo usa todas las mañanas en absoluta impunidad y cinismo.

Una propuesta sensata, lo he dicho antes, es olvidarse del PRI y llamar a la conformación de un nuevo partido, teniendo cuidado de que las figuras más cuestionadas dejen el protagonismo a perfiles frescos. ¿Quien le pone peros a Enrique de la Madrid, por ejemplo?. Por ahí deberían empezar.

 

Rompeolas

Aguas con la violencia
Sheibaum, defensa forzada
Ningún panista de Juárez
Guardadito se ve más bonito

Con especial cuidado y la mayor importancia, las autoridades de seguridad deben atender la emergente ola violenta que llegó a las inmediaciones de Chihuahua, capital. La gente no quiere explicaciones sobre los grupos en guerra, presuntos responsables de muertitos o territorios ocupados. Quiere vivir en paz, tener seguridad en sus bienes y personas, pues conoce por experiencia propia las consecuencias de la espantosa guerra entre carteles que dirigió Calderón, cuando Chihuahua vivió un éxodo empresarial sin precedente y la economía se paralizó. Esa historia la conocemos muy bien, hoy con la diferencia de que nada pueden esperar del Gobierno Federal. Al contrario, si hacen algo sería para “calentar la plaza”, como los sicarios del mal suelen decir. Ahora mismo este es el tema de mayor relevancia, se descompone y no hay forma de componerlo en tres años.

……………….

Javier Corral envió a un propio con la encomienda de preguntar a Claudia Sheinbaum, durante la rueda de prensa de hoy, su opinión sobre las acusaciones domésticas en su contra. Esperaba que la virtual presidenta electa hiciese una defensa puntual de su caso. Pues nada, ella se limitó a decir que había un tema político de la gobernadora (¿en esos niveles cual tema no es político?) pero que Javier debería responder. Acotó que sigue siendo parte de su equipo, donde por cierto no se ha visto, y que es senador de Morena. Tan tan, diez segundos y a otra cosa mariposa. Por cierto, ningún medio importante recogió esa parte de la conferencia, los temas fueron otros.

……………….

En vez de promoverse para la dirigencia del CDE, los panistas juaritos deberían hacer un sincero ejercicio de reflexión y autocritica interna, empezando por preguntarse las razones por las cuales sólo pudieron acreditar el 20 por ciento de representantes en casilla, en la pasada elección. Con ese dato, me extraña que la catástrofe electoral no haya sido mayor, a pesar de que hubo distritos donde perdieron nueve a uno. Mencione cualquier nombre y ninguno(a), para no hacerlas menos, está calificado para ser dirigente estatal. Empiecen la reorganización de Juárez y luego exijan cambiar al estado completo. La pregunta para quienes deciden en el PAN, es ¿quién sí lo está?. Al tomar el poder dejaron de formar cuadros y ahora tienen dificultades para encontrar un dirigente capaz de pelear en las trincheras electorales contra los mapaches guindas. No pierdan la fe, el que busca encuentra.

…………………..

Apenas ayer comenté que no le hacía gracia a la gente del poder que César Duarte intentase ensayar una especie de paseillo triunfal, ahora que recibió el anhelado cambio de medida cautelar para regresar a casa. Bien, hoy la gobernadora Campos le mandó un “comedido” mensaje, sugiriendo que “guardadito se ve más bonito”, que tenga respeto por los chihuahuenses. Duarte debería tomarla en cuenta, primero por que no es bueno incomodar al poder, como también dije ayer, segundo porque un mal día él mismo puede sufrir los desaires que sufrió Javier Corral en restaurantes de la Ciudad. Han pasado ocho años desde que Duarte dejó el poder, pero los chihuahuenses todavía pagan los abusos y excesos de su gobierno. Un reducido grupo esperaba su libertad, pero miles lamentan su gobierno, abusado.