*El festín de la caja chica

* Los verdugos de hoy …

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 Eterna y aterradora transcurre la administración de Javier Corral, para los empoderados en la era de la corrupción duartista. Son noches de pesadilla y días de café sin chisme que les acomode. Conste que son cinco años y apenas va la mitad.

Cuando se ven, ingenuos, fuera de peligro pensando que la tormenta pasó y el sol brilla en lo alto del firmamento, el creativo e inquieto gobernador los sorprende con nuevas amenazas veladas, como la filtración a Reforma, oscureciendo su horizonte.

Debería patentar su estrategia para mantenerse en medios sin tocar al “as de oros”. La gracia más reciente, que no la última, consistió en recrear un festín en la caja chica del gobierno anterior, donde buena parte de la clase política de Chihuahua se dio gusto extendiendo la mano sin más esfuerzo que firmar un recibo.

Trágame tierra, otra vez la solicitud urgente de amparos intentando evitar la suerte de los infelices radicados en San Guillermo, por causa de los maxijuicios. Harán bien si piden asesoría legal, el impulso de venganza exhibido por Javier Corral no conoce límites y un mal día cualquiera de los involucrados podría recibir en sus domicilios una visita inesperada, a las cinco de la mañana, de los querubines a cargo de Peniche.

Traerlos aturdidos, pendientes de no salir sin el amparo bajo el sobaco, volteando en cada dirección antes de dar un paso fuera de casa, se ha convertido en el juguetito de Corral y sus asociados en la campaña contra César Duarte. Gozan viéndolos temblar ante la posibilidad de ser detenidos y, al saberlos debilitados, más exacerban sus apetitos vengativos. Como los felinos cuando huelen sangre, se vuelven locos buscando la fuente de carne.

Pero Javier Corral y sus asociados en la obsesión contra Duarte deben tener presente una máxima de la Revolución Francesa: “los verdugos de hoy serán las víctimas de mañana”, tropicalizada por Mario Tarango como “los matanceros de hoy serán las reses de mañana”.

Si, el poder se acaba y entonces vienen las de vuelta. El gobernador ha pervertido la justicia hasta grados inauditos –mantener a varios inocentes detenidos es una infamia- con tal hacerse un espacio en la agenda nacional. Usa las acusaciones como parte de su temprana precampaña por la Presidencia de la República, ajeno al dolor de los inocentes que son pisoteados. Los corruptos y oportunistas que la paguen, pero es ruin hacer generalizaciones.

Perfecto, hoy puede hacerlo, darse gusto, tiene las instituciones del estado a su servicio, pero le vendría bien preguntarse que sucederá después de octubre del 2021. O Corral piensa que después de gobernador será presidente y de ahí Papa o Secretario General de la ONU. Eso mismo pensaba Duarte y vean en qué termino, sólo por si el apunte sirve.

Entonces la lista de tiradores en su contra será tan larga como los amparos promovidos por la extensa lista de atemorizados duartistas y y no faltarán aquellos que tengan excelente posición de tirador. Por desgastado y ordinario que parezca el dicho, la política es una rueda de la fortuna y quienes cometen el error de suponer que siempre estarán arriba , como Duarte, suelen pagar un precio altísimo por el desatino.

A mitad del camino llegó el festín de la caja chica ¿Cuándo soltará los nombres de la famosa nómina secreta? ¿Cuándo empezarán a caer los “testigos protegidos? ¿Cuál será la perlita que los haga llegar hasta los tiempos preelectorales? A falta de Duarte la estrategia ha sido echar montón. No cambiará mientras el “as de oros” permanezca prófugo. Ánimo, ya sólo falta la mitad y el tiempo avanza, sin prisa pero avanza.