Poncho Romo, como su jefe en Palacio Nacional, continúa vendiendo espejitos, a siete meses de ser gobierno. Va por el país de promesa en promesa sabiendo que ninguna cumplirán, despreocupado por que ni siquiera tienen la menor intención de, al menos, valorar desde el punto de vista financiero la viabilidad de lo que pregonan.
Invitado especial a la sesión del Desarrollo Económico del Estado, el Jefe de Gabinete de López Obrador describió cuatro proyectos prioritarios para desarrollar la entidad: Ampliación del Centro de Convenciones, recuperando las 25 hectáreas de Ferromex; impulso a Juárez con lo que llaman iniciativa de “Innovación y Tecnología”; regular el ciclo de riego de Cuauhtémoc, en beneficio de 35 mil familias, construir la carretera de Topolobampo-Dallas, desde luego pasando por frontera de Chihuahua, ese gran corredor del que llevan hablando décadas.
Imposible evitar un impulso de hilaridad, hablamos de viejos y empolvados proyectos que arrastran de gobiernos anteriores sin que nadie los tome sinceramente en cuenta y el empresario neolonés los presenta como novedad. Hay tantas necesidades para impulsar el desarrollo económico de Chihuahua, que verlos enlistar esas ideas largamente guardadas en el armario causa asombro.
Y lo dice con la convicción del vendedor que, seguro de la inutilidad de su producto, lo presenta y ofrece como la última maravilla, alentado por la ingenuidad de los compradores. Desde luego ninguno de los que acompañaron el vendedor de espejitos es ingenuo, ahí estaban empresarios avezados y políticos buscando futuro, pero todos pusieron cara de “es la mejor idea que he escuchado en años”, como buscando complacer al bromista.
Ya entrados en gastos, que de una vez saquen las vías del ferrocarril del Centro de Juárez y lo recuperen como prometió Duarte teniendo al Noa Noa como ancla de los nuevos antros, regenere el Centro de Chihuahua con aquel impresionante proyecto de Fernando Baeza que pretendía limpiar desde la Juárez hasta el Canal, partiendo de Catedral, termine el proyecto carretero Gran Visión con el que soñaba Oscar Flores, coloque un tubo macizo sobre la cortina de las Vírgenes para aumentar la captación, el que puso Patricio colapsó, y nos traiga la inversión perdida en tecnología aeronáutica, pues Querétaro nos ganó la carrera por tres cuerpos.
A Chihuahua le irá bien con que lleguen a tiempo los recursos para continuar el mantenimiento de carreteras federales –el tramo entre Chihuahua y Cárdenas lleva años sin que logren concluirlo-, envían viáticos suficientes para la guardia nacional -gasolina, hospedaje y alimentación-, no sea que al rato se lo exijan a los gobernadores y no retrasen las participaciones federales.
En las condiciones actuales, donde no hay dinero más que para el asistencialismo electoral y los proyectos megalómanos del presidente, ya sabe Refinería de dos Bocas, Tren Maya y el pegote de Santa Lucía, es a lo más que Chihuahua puede aspirar de la federación. Regular el ciclo de riego en Cuauhtémoc y la carretera Topolobampo-Dallas, por favor.
Seamos sensatos, para el nuevo oficialismo Chihuahua es la prioridad número 1234, de 1233, a López Obrador el norte lo tiene sin cuidado y encima las relaciones con el gobernador siguen siendo entre confusas y traumáticas. Pero el presidente y sus aplaudidores, como Poncho Romo, siguen en campaña, es lo que saben hacer y donde están cómodos.
Rompeolas
En la Presidencia Municipal le tomaron el pulso al plebiscito. Maru y sus tres magníficos –César, Mario y García Portillo- parecen emocionados con medirse nuevamente en las urnas, o se arman de valor declarando que un ejercicio de consulta con carácter vinculante les vendría de perlas. Ayer la presidenta declaró que iría, como cualquier ciudadana, a votar por el Si, expresión coincidente con lo que han dicho cada uno de los magníficos por separado. Quizás tengan razón, en una votación llevan las de ganar y saben que si van a las urnas y salen triunfantes, apalancan su proyecto hacia el gobierno. ¿Mala estrategia de Corral y los promotores del plebiscito para intentar frenarlos? Pronto sabremos, en el inter las negociaciones siguen en el Congreso, como se ha dicho, voto por voto, diputado por diputado hasta conseguir los 22.
