*En los linderos del abismo… horror

* México, fabrica mundial de pobres

* Politiquería como aviesa respuesta

* Llegaron los aumentos y no con cerveza

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Sin saber en qué parte de la emergencia sanitaria nos encontramos -el número de pruebas es ridículo para tener al menos aproximaciones aunque sea superficiales- los últimos datos sobre la economía nos han puesto de frente a un profundo abismo del que saldremos sabrá Dios cuándo y cómo.

El Seguro Social confirmó la pérdida de 555 mil empleos formales sólo en abril, una caída mensual de 2.7, mayor a la de 1995, los funestos errores de diciembre. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) estima que la pobreza en México aumente éste año en casi ocho millones, por diez que calculó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y Concanaco estima que al finalizar el año habremos perdido tres millones de empleos, entre formales e informales.

Las cifras son aterradoras y sólo nos asomamos al abismo de lo que será nuestra “Nueva Realidad”, la de un país de oportunidades canceladas, sacrificio extenuante, involución social, esperanzas desechas, cuyas consecuencias finales ignoramos, pero se traduciría en aumento de precios, escasez de empleo, boom violento y politiquería vociferante.

El presidente López Obrador presentó ayer a los gobernadores el programa de reapertura económica y hoy lo hará del conocimiento público. Especular es innecesario, sin embargo como ha conducido la economía del país uno pensaría en un rosario de sandeces o acciones desarticuladas pensando que sin proteger al empleo puede estabilizar una bolsa de apoyo suficiente a los más pobres. Ilusiones, la recaudación caerá irremediablemente.

Con independencia de las medidas que anuncie, especialistas como Rodolfo de la Torre, director de Desarrollo Social del Consejo de Estudios Económicos Yglesias (CEEY) estima que podríamos empezar la recuperación en cuatro años y regresar a los niveles de 2019 nos tomaría una década. Pensemos en otra generación perdida, la generación del Covid.

Quiero evitar el pesimismo, aceptar que “vamos requetebién” y confiar en que los nuevos paradigmas conceptuales “bienestar”, “desarrollo”, “espiritualismo”, nos sacarán progresivamente del abismo. Imposible, cada mañana estoy más decepcionado, escucho los desvaríos y me pongo a templar ¿Hoy es otro de esos días? A ver con que nos sale.

Rompeolas

Frente al colapso económico, nuestra clase política sólo actúa con la mirada puesta en la próxima elección o buscando la forma de sobrevivir en la nueva realidad. No he visto a ningún político de alto perfil pensar en la próxima generación, recordando a Churchill. Los nuestros son políticos de plastilina, anodinos: los que no están temerosos de ser llamados a cuentas por la Unidad de Inteligencia Financiera, se avinieron a los deseos del Gran Tlaoani viendo las pequeñas canonjías; otros, cínicos, surfean sobre la iniquidad del momento esperando nuevos tiempos y están los siempre oportunistas que hacen de los cálculos electorales su política de vida. Ninguno está dispuesto a correr riesgos por México ¿Qué caso tendría? Pasará esta crisis y los jodidos seguirán estando jodidos, los corruptos viendo la forma de hincar el diente al presupuesto y los atolondrados con suerte esperando que otro hueso les caiga del cielo. Es lo que hay, lo que tenemos. Mejor que se los lleve el Covid, le haría un gran servicio al país.

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La gente se vuelve loca por falta de cerveza, abrieron los oxxos y como si la regalaran, hicieron filas de horas a medio sol. Quizás lo mejor sería poner a la industria cervecera entre las empresas “esenciales”, esta pandemia nos ha enseñado que puede ser más peligrosa la abstinencia que el consumo, la turba ya demostró que es un producto de primerísima necesidad. Tranquilos, pronto reanudarán la producción y habrá suficiente en los expendios. Por cierto, ya checaron la forma en que aumentaron alimentos básicos como arroz, frijol, huevo, papel y otros. Son las primeras expresiones del colapso que viene, por si algunos optimistas tenían dudas.FC