Hasta en sus propias redes reprendieron a Javier Corral, ciudadanos indignados, el domingo pasado. ¿Qué le pasa, ve la violencia y se muestra corriendo en preparación de una carrera? ¿En qué momento lo perdimos? Preguntó, sinceramente preocupado, un panista de alto perfil.
Es la pregunta que se hacen muchos chihuahuenses, panistas o no, por la frivolidad con que se conduce el gobernador en los peores, o casi, tiempos de violencia que sufre la entidad: Un día después del combate en Uruachi, él mismo –o sus asesores- suben a redes una fotografía trotando, despreocupado y complacido por mejorar tiempos.
Ese tipo de publicaciones otorgan la razón a quienes piensan que está disociado de la realidad. Simplemente no se da por enterado de la crisis de seguridad que vive Chihuahua y peor si la ve pero decide ignorarla. Además de frivolidad pecaría de indolencia.
Cuando la primer matanza en el hoy corredor de la muerte, Cuauhtémoc-Rubio, el Universal lo exhibió jugando golf, también feliz de la vida, durante un fin de semana largo en Mazatlán. Reaccionó sorprendido y molesto por la crítica y dijo que el medio “actuaba de mala leche”, pues no entendía la razón del señalamiento dado que se encontraba en días de asueto.
El domingo se balconeó a si mismo, cuando los cuerpos en Uruachi seguían frescos y las armas humeantes destaca su imagen de corredor. Alguien debería volverlo a la realidad antes de que los grupos criminales tomen por rehén al estado completo.
Se entiende que Juan Ignacio Zavala, hermano de Margarita, le cargue la mano en sus colaboraciones editoriales, en la más reciente lo llamó, el gobierno “del golfista Javier Corral, en la que las matanzas son cosa de todos los días”. Ahí prevalecen motivaciones políticas obvias.
Pero que uno de los nombres más influyentes internacionalmente en temas de seguridad, Edgardo Buscaglia, lo despedace en sus redes es otra cosa. En su cuenta de twitter el analista posteó el sábado catorce: “Yo no soy el típico político culero, cobarde mexicano, así que no andemos con vueltas: el gobierno de Corral es una cloaca y un fracaso hasta hoy”.
Y como se abrió la polémica, al otro día amplió sus calificativos: “Limpiar un gobierno de mafiosos con un Estado débil, requiere mucho mas que un Salvador “honesto”. El gobierno de Corral es un SUCIO fracaso hasta hoy”. Las comillas sobre honesto y las mayúsculas de sucio son de Buscaglia.
Dado que a Corral sólo le preocupa lo que piensen en la Ciudad de México, los chihuahuenses no lo merecen, debió reaccionar pronto y fuerte, pues en la misma publicación Buscaglia dice que canalizó dinero a la ONU México y por eso lo acosan 24 horas al día, desde la crítica.
¿También colocará a Buscaglia entre los corruptos de César Duarte que actúan por que no les da dinero? Es el estribillo mediante el cual pretende cubrir su incompetencia.
Anotación al margen. Ningún panista de prestigio salió en su defensa, el que lo hizo fue Fernando Belauzarán, diputado perredista de los galileos, el grupo que lo alienta para ser candidato del Frente, ante la inminente caída de Ricardo Anaya, su asociado temporal que, por la obsesión de poder, fracturó al PAN haciendo renunciar a Margarita Zavala.
El domingo otra balacera en Villa López y ayer una más en Madera. A propósito ¿Mejora su golpe largo, ya consiguió el tres bajo par?¿Cómo va la precampaña por la candidatura del Frente?. Si no fuese de la mayor importancia, su negligencia movería a risa.
Mientras los sicarios del mal se disputan el territorio, en la ciudad de Chihuahua las pandillas de asaltantes aprovechan el vacío de poder y hacen de las suyas. Sólo unos días atrás asaltaron una sucursal de la CFE, lo que nunca se había visto en la ciudad, y ayer hombres armados robaron su auto y diez mil pesos a una mujer en la colonia Guadalupe, cuando precisamente salía del banco. Más tarde robaron 39 mil pesos a un mensajero, antes de hacer el depósito.
Que más da, no pasa nada, se matan entre ellos; son grupos rivales disputándose el territorio; antes estaba igual o peor solo que ocultaban los datos -¿también las balaceras?- Faltan elementos federales; Duarte pactó con el diablo, nosotros jamás. Todo menos aceptar que hay una severa crisis de inseguridad y que han sido francamente incompetentes para contenerla.
En éste espacio se ha dicho mucho que tras las ejecuciones entre sicarios, llegaba la criminalidad “doméstica”. Pues los últimos acontecimientos reseñados en las páginas policiacas, de los cuales arriba fueron citados únicamente tres ejemplos, dan cuenta de que esos delincuentes “menores” ya operan a plena luz del día sin miedo a ser detenidos.
Lo que faltaba en los maxi-juicios de la corrupción. Hay versiones de que el edificio del PRI en la Dale, estrenado meses antes de las campañas a gobernador, está en la mira de Maclovio Murillo y la señora Olmos, para solicitar un embargo precautorio. Lo requerirían a fin de resarcir el dinero ilegal que ingresó al PRI, por cuyo delito está detenido Pedro Mauli y Karina Velázquez sujeta a proceso. Luce ojón para que sea paloma, pues son bienes del CEN, pero todo lo que alimente el morbo de la plebe cuenta y ese sería un golpe mediático que regresaría la sonrisa a los empoderados del Nuevo Amanecer.
El Arquitecto de la Política, cuyo nombre de pila es Carlos Carrera, tomó en serio su vocación artística, al fin. Durante años desperdició su talento esperando que lo postulasen alcalde, hasta que recapacitó y a lo suyo.
Hoy presenta la exposición “Canto de Agua”, que contiene sus mejores acuarelas de los últimos tres años, treinta y una obras en total. Está que no cabe en sí, supervisando de cerca el montaje y hasta la lista de invitados infaltables.
Él mismo explicó que se trata de un homenaje a la Quinta Gaméros, tema principal de la exposición, que además presenta paisajes de Chihuahua y arquitectura. Así que ya lo saben sus amigos, admiradores y aspirantes a mecenas –ningún artista que se precie de serlo debe estar desprovisto de mecenas– vayan preparados con la chequera o por lo menos una tarjeta, valen también las de débito, no sea que se agoten las treinta y un obras la misma noche.
Felicidades al arquitecto Carrera, quién iba a pensar que aquel distraído y taciturno niño que nació en la Mesa del Huracán, donde el hosco y frio viento hace recordó y vuelve, llegaría tan alto.