*Días que marcan rumbo

* ¿Qué Javier veremos?

* A prueba Álvarez Monge

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La próxima será una semana que podría marcar la segunda parte de la administración Corral, o quincena si alargamos la toma de decisiones legislativas hasta el límite del año, cuando cierre el Congreso el periodo ordinario de sesiones.

Fuentes Vélez, Ismael Rodríguez, convertido de facto en asesor de Hacienda y Coordinador del gabinete, y el propio Javier Corral han puesto sus esperanzas en la reestructuración de la deuda -48 mil millones de pesos- y el buen trato fiscal de la Federación. Les urgen apoyos extraordinarios.

En nuestro sistema político, acentuado al inicio del nuevo régimen, las decisiones importantes quedan sujetas a la voluntad del gran tlatoani, en consecuencia imparta más de lo que debería la relación entre los hombres del poder, en el caso particular López Obrador y Javier Corral.

La reestructura y el buen trato de Hacienda son determinantes para un eficiente desempeño del gobierno local en los próximos dos años y ambos quedan sujetos a la disposición de Javier Corral hacia el gobierno de López Obrador.

En otras palabras, la correspondencia de Hacienda Federal depende mucho de la habilidad que muestre el gobernador para decir si señor e inclinar la cabeza y, en menor medida, de los buenos oficios de sus operadores domésticos en el Congreso local, donde el PAN tiene una precaria mayoría que le sirve de muy poco.

Javier ha dicho que las finanzas ahogan su administración. Es cierto, no ha podido resolver la herencia maldita de Duarte pero en buena medida eso se debe a su feroz y absurdo enfrentamiento con Peña Nieto, al que intenta meter a prisión.

Pedir buen trato si a cambio ofrecer órdenes de aprehensión es la mayor insensatez. Hoy sabe que a mentadas nada conseguirá, quiso morder más de lo que alcanza y en el intento sintió frío, haciendo sufrir a Chihuahua por su obstinación.

Hoy está frente a la oportunidad de congraciarse con López Obrador y sólo podrá conseguirlo si asume una actitud de aliado, no de adversario. Al nuevo tlatoani le choca verse desafiado o que alguien ose disentir. Ahí está el reto de Corral, necesita entender que si busca buen trato para la entidad debe entregar su amor incondicional al patriarca.

Hasta hoy ha enviado mensajes en doble sentido; un día se monta sobre la rebeldía habitual de cuando ejerció de senador y al otro se hace seifies con López Obrador, aprovechando cualquier oportunidad.

Claramente no encuentra su lugar y menos cuando mira de cerca que Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco, lo desplazó de un solo movimiento en la preponderancia de los reflectores nacionales.

Par hacer una administración eficiente en la segunda mitad -la primera fue catastrófica- deberá poner a un lado sus ambiciones presidenciales y concentrarse en los problemas de la entidad, pues de mantener su activismo político será visto como rival y eso es inadmisible en un régimen de voluntad única. Ir por el país como candil de la calle y oscuridad de su casa nunca es bueno.

Los primeros indicios de sus buenos oficios serán vistos en el Congreso local en el curso de los próximos días, como se dijo al principio ¿Reestructura la deuda con el apoyo de Morena o lo hace comprando voluntades de los diputados nanos? ¿Recibe el apoyo ofrecido por la Federación, para cerrar el año, o se conforma con los “cortos” como el de 500 millones contratado la semana pasada?.

Por el bien de Chihuahua, espero que asuma su papel de gobernador y olvide las quimeras de gran fiscal sin cartera y los proyectos presidencialistas.

En esta tarea, la de conciliar a las atomizadas fracciones parlamentarias, está puesto a prueba Fernando Álvarez Monge, coordinador de la menguada mayoría panista y políticamente incondicional a Corral.

Si consigue hacer su trabajo, sacando la reestructuración y votando un presupuesto a modo del Ejecutivo, habrá justificado su coordinación para el resto de la Legislatura. Si fracasa perderá liderazgo en el Congreso y verá mermadas sus aspiraciones a la presidencia municipal. También para su futuro político son fundamentales los próximos días.