Ayer presenté mi análisis sobre el PRI, partido al que no concedo la menor posibilidad de hacer una campaña competitiva, en la presente elección. Hoy voy con Armando Cabada, pero antes quiero decirles a mis amigos priistas –se que se armó buen revuelo en algunos grupos- que sólo se trata de una observación particular esforzadamente objetiva. No soy yo el que descalifica a su partido, fue la sociedad harta de la corrupción de César Duarte y Enrique Peña. Ya veremos que les deparan lar urnas. Por mi parte les deseo éxito.
En Armando Cabada tampoco quiero detenerme más de lo necesario. El edil juarito es un compendio de lo que no debe hacerse en política, teniendo todo para competir está terminando en un fantasma soso, una figura insípida atrapada en redecillas de intrigas y malquerencias de sus propios colaboradores. Es una pena, en él se esperaba que la corriente independiente tomase fuerza.
Es el presidente municipal de la Ciudad más poblada y de mayor impacto económico en el estado, no está atado a ningún partido político, dispone de presupuesto para hacer precampaña y sin embargo hoy nadie que conozca la política doméstica lo ve de gobernador. En lo personal creo que no llegará ni a candidato, a menos que su vocación sea de suicida. ¿Qué le sucedió en el camino?.
No lo conozco bien, pero en él veo a un hombre sin la pasión necesaria para tragar sapos, dar las gracias y pedir más. En su sangre no corre el deseo de poder, quiere tenerlo, pero no está dispuesto a sacrificarse ni sabe como hacerlo. Es un político de plastilina al que le llegó la Presidencia Municipal como caída del cielo.
Su falta de pasión lo puso en brazos de asesores indignos de confianza y dejó en ellos las responsabilidad del trabajo político que le correspondía hacer personalmente, pensando que compañeros de viaje le desmerecían, que no estaban a su altura. Una alta dosis de soberbia y mezquindad contribuyeron a su asilamiento político.
Intentó hacer una alianza con Marco Adán Quezada y Alfredo Lozoya, los tres esperanzados en construir vía competitiva contra Morena y el PAN. Imposible, cuando empezaron a trabajarla, fueron los mismos asesores de Cabada quienes la boicotearon, ignorantes de que se boicoteaban a sí mismos y traicionaban a su jefe.
El equipo de Armando Cabada es de una idea muy primaria de hacer política, incapaces de hacer equipo se despedazan entre si cuando todavía no tienen ganado nada. Además son operadores ineficientes, también coquetearon con Elba Esther Gordillo para involucrarse en el nuevo partido de la maestra, con tan mala experiencia que fracasaron en dos oportunidades para hacer la asamblea del partido, y cuando el caballo Lozoya quiso realizarla en Parral, hasta allá llegaron a batirla. Querían que el caballo hiciese el trabajo sucio y ellos quedarse con la dirigencia. ¿Cómo?.
¿Qué parte de que en campaña hasta putas y cabrones, como decía Oscar Flores, no pueden entender? ¿Qué parte de que en campaña es sumar, sumar y en gobierno restar, restar, no pueden entender? ¿Qué parte de que se consigue más con una gota de miel que con una tonelada de hiel no, pueden entender? ¿Qué parte de que es mejor la mitad de uno que el cien por ciento de cero, no entienden? ¿Qué parte de primero se caza la liebre y luego se hace el caldo, no entienden?.
Si Cabada es inteligente, si muestra un tímido sentido de agudeza, su destino ahora es construir, ya rendido, una alianza con Morena. Es el partido con las mayores posibilidades de ganar Juárez, con que lo dejen transitar tranquilo su sexto año ganaría mucho. Rifársela con Javier Corral a todo o nada es un riesgo que la sensatez no aconseja. Él sabrá o tomarán también esa decisión sus asesores.
En esa disyuntiva está terminando un prospecto que, teniendo todo para encabezar un proyecto ciudadano, se perdió en su falta de pasión, inexperiencia y mezquina perversidad de los suyos. No pongo a Cabada entre los finalistas, su valor es de alianza y sólo para Ciudad Juárez.
Rompeolas
Mario Mata convocó a rueda de prensa en Delicias, pero se le aparecieron los productores enfadados, hartos de que les vean la cara. Propone una encuesta ciudadana y la realización de foros, como queriendo tranquilizarlos para que no adopten medidas radicales de presión. El problema es que los agricultores se han percatado que tanto el diputado Mata como el senador Madero avalan la componenda que Javier Corral hizo con López Obrador para permitir que se lleven el agua del distrito. De cobarde, traidor a Chihuahua y mentiroso, un productor –el video circula profuso- no bajó a Javier Corral. Quien los encaró es un panista viejo, vueltos hoy contra Corral, pues nadie les quita la idea de que los traicionó. No son tarugos, saben que pudieron más los acuerdos palaciegos, entre los que se encuentra Duarte, que sus legitimas exigencias a conservar el agua que sustenta la región.
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Empezaron a salir los videos atribuidos a Emilio Lozoya y con ellos las imágenes de la corrupción; millones de pesos empacados en plástico, presumiblemente entregados a funcionarios anteriores del senado, entre ellos Guillermo Gutiérrez Badillo, hoy secretario particular de Francisco Domínguez Servién, gobernador de Querétaro. El primer botón de muestra para que todos aquellos cuya conciencia está intranquila vayan adquiriendo dosis extras de Tafil y paciflorina, la venganza del mesías está en marcha. Y Gustavo Madero ¿Cómo duerme estas noches? ¿tendrá pesadillas o está hecho a los sustos extremos? A poco dejó pasar bobito ese “negociazo”, siendo un presidente del PAN que no se cansó de alabar las reformas. Opinen quienes conocen al senador.
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Por cierto, reportan que Madero asumió el oficio de “matón” en las últimas semanas, yendo de reunión en reunión, principalmente con empresarios, a prevenirlos de que deben alinearse con su proyecto ahora, después será demasiado tarde. Y remata el “ofrecimiento que, presume, no pueden rechazar” con que a Maru Campos le girarán orden de aprehensión el 14 de febrero, no por ser el día de amor y amistad, en esa fecha se realizaría la asamblea electiva del PAN. Entre otros, habría dejado sus amenazas en Cuauhtémoc, ante los empresarios más poderosos de la manzana, quienes pasaron el chisme. Es la desesperación de Gustavo, como avanza el tiempo y no encuentra adeptos le ha dado por amenazarlos con una especie de están conmigo o contra mi. Imagínelo de gobernador, perdonando vidas en él sería un gesto magnánimo.
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Jorge Ramírez -¿magistrado?- está en una carrera contra reloj. Un juez le negó la suspensión definitiva, contraviniendo a un Tribunal Colegiado, de modo que puede ser detenido en cualquier momento, pues carece de fuero. Tiene el recurso de la revisión, que seguramente ya la promovió, pero en lo que resuelve el Colegiado está obligado a permanecer pecho tierra, los querubines de Peniche están tras sus pasos. No es lo mismo litigar en las frías celdas de San Guillermo que escondido y mucho menos que desde un comodo restaurante en San Antonio, Texas. Es el único que ha logrado escapar a la furia de Javier Corral ¿Conservará la libertad en lo que resuelven su recurso legal? Corren apuestas.
