En el submundo de policías y ladrones, traición y mentira es moneda corriente. Dar por buena una versión difundida deliberadamente por cualquiera de los grupos criminales es tanto como creer que Caperucita Roja se comió al lobo y después a su abuelita. Sin embargo cuando las versiones causan precedente lo sensato sería tenerlas en cuenta, por si acaso.
Es lo que sucede con el jefe de la policía estatal, Oscar Aparicio. Los rumores de que protege a determinado grupo delictivo vienen sucediéndose desde los primeros meses de la administración Corral, son tema de conversación en mesas de café y barras de cantina, donde la gente de abajo las toma por ciertas.
Abusados, de tanto ir y venir chismes y señalamientos llega el momento en que hasta los más escépticos entran en duda y se preguntan si, según afirma la gente, realmente Aparicio está al servicio de algún grupo delincuencial, como denuncia el infeliz torturado.
Con independencia de versiones arrancadas a tortura y rumores de café, sin sombra de duda ese video es un mensaje directo al Fiscal Peniche y al gobernador Corral. Tómenlo como les venga, pero tengan presente la historia reciente.
En lo personal jamás opinaría sobre algo tan delicado, en estos casos lo mejor es guardar silencio y dejar que hablen los señores del mal, así sea mediante sus conductos habituales; mantas, mensajes en ejecutados y videos como el que ayer hicieron circular. Por mi que hagan de su vida un papalote mientras no se metan con los civiles.
Con independencia de lo anterior, diversos estudiosos del fenómeno delictivo encuentran imposible de ignorar el video donde presuntos sicarios del mal, portando uniforme regular, torturan a un enemigo hasta hacerlo declarar que Aparicio y los elementos a su cargo están coludidos con uno de los grupos delincuenciales.
Al ver ese video, con todas las reservas que usted quiera ponerle, establecen comparaciones y recuerdan la trágica historia de la exprocuradora Patricia González y el desdichado destino de su hermano Mario. ¿Que pensará el gobernador Corral, asumiendo que se entere, pues ya ve que tratándose de temas así suele cerrar los ojos o meter la cabeza bajo arena?.
La historia de Paty y su hermano torturado hasta la muerte es tan siniestra que no vale la pena recordarla, sigue presente en la mente de muchos chihuahuenses y, sin temor a equivocarme, es uno de los episodios violentos que marcó el gobierno de Reyes Baeza, así haya sucedido al final del mismo.
Son muchas las luces rojas prendidas sobre Aparicio y sus elementos, los vecinos de Cuauhtémoc, la sierra y Jiménez no tienen duda de donde están sus intereses. Sean o no verdad los rumores, la percepción ciudadana empieza a generalizarse y la conclusión es mala para el jefe de policía.
Aguas, cuando asuntos así son llevados al límite explotan de un momento a otro con la violencia de un volcán y a su paso arrastran a cualquiera. Faltan dos años más para que termine el gobierno de Corral, imagine hasta donde llegarán esas versiones durante la recta final de quinquenio.
Rompeolas
Todo sentido de política e institucionalidad se ha perdido en el PRI ¿A que se atiene el presidente del Comité Municipal de Chihuahua, Fermín Ordoñez, desafiando en Público a Omar Bazán, presidente del Directivo Estatal? Pues a nada, en ese partido, como en todos, no hay quién tire la primera piedra y mucho menos Fermín, cuyas relaciones de vida son, por decir lo menos, sospechosas.
El remedo de consulta a mano alzada entre seccionales, celebrado durante la reunión semanal, para demostrar que quieren mantenerlo de presidente, sólo demuestra su desesperación. Sin opciones viables para mantenerse activo, se aferra a un clavo ardiendo.
De nada le servirá cuando haya nuevo dirigente nacional del PRI, que sin duda será Alejandro Moreno. Entonces las barajas quedaran repartidas y Omar Bazán permanecerá empoderado, está en el grupo ganador. Ahora, si Fermín ya optó por Morena, pues adelante y que se forme en la fila, total, es donde terminan reciclados los oportunistas de la política, la mayoría del PRI.
