La supersecretaria de la Justicia

* ¿Dónde quedó el Presidente?

* El precio de “cargar” con Lucha

* Reyes en la baila rumbo al 2018

* Cabada; que no pero mejor si

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Lo mejor con la reforma a la Ley Orgánica del Poder Judicial, aprobada ayer en apego a la tradición que la práctica legislativa reconoce como “albazo”, es que dejarán en paz –se supone- al Supremo Tribunal, malmodeado a gusto por los últimos dos gobernadores, en una seguidilla de atropellos e imposiciones que deshabilitan el ejercicio de la Justicia en la entidad.

Ojala y con esa reforma concluya la campaña de atentados, los odios personalísimos entre Duarte y Corral lo batieron a niveles inimaginables. Si, empezó Duarte tomándolo como una dependencia de gobierno para hacer magistrados a sus amigos y proteger su salida; pero siguió Corral hasta hacerlo girar en torno a sus intereses, que por momentos parecían actos de venganza o caprichos del que “todo lo puede”.

No obstante los buenos deseos, hay un artículo inquietante, el 307 de la Sección Quinta. Dice que “el Consejo de la Judicatura contará con una Secretaría Ejecutiva que fungirá como enlace del Pleno y de la Presidencia con los Consejeros, magistrados, jueces, órganos administrativos del Poder Judicial y los particulares. Dará seguimiento y trámite de los asuntos del Consejo, estará adscrita a la presidencia y tendrá fe pública en todo lo relativo al ejercicio de su función”.

La definición del cargo suena muy parecido a la descripción de un apoderado legal al que dan las más amplias facultades para “pleitos y cobranzas, contratación de deuda, enajenación de bienes, celebrar convenios con otras empresas o instituciones, contratar y despedir ejecutivos, disponer de su capital en acuerdo a su criterio sin rendir cuentas al Consejo de Accionistas…”

¿Quién será esa supersecretaría ejecutiva con tan amplias facultades? Por la descripción de su cargo da la impresión de quedar encima del presidente, pues aunque estará adscrita a la presidencia, será enlace con el Consejo, magistrados, jueces, organismos administrativos y particulares, como si la presidencia no existiese o fuese decorativa.

Tanto poder depositado en una sola persona abruma, pero si ya crearon la figura, la relevancia del cargo exige que sea una persona con amplia trayectoria en el Poder Judicial, una especie de decano o magistrado presidente en retiro, de amplia solvencia moral y probada capacidad jurídica, un doctor en derecho con obras publicadas y reconocimiento internacional.

Es una especie de tótem en el Poder Judicial, mínimo que sus credenciales sean intachables. Salir con que puse a mi amiga, al compañero de partido que no traía chamba, al operador político para que pinte de azul el Tribunal o duplique cargos en una misma persona como si fuesen dependientes de botica, sería inadmisible en una responsabilidad de tal magnitud.

¿Quién es él o la supersecretaria? Tatatannnnn. Ese nombramiento será la envidia de César, exbueno, Jáuregui o Gustavo Madero, sin su permiso no venderán ningún programa en el Poder Judicial.

Conocida la reforma a la Ley Orgánica del Poder Judicial y la figura de la supersecretaría, el caso de Lucha Castro queda reducido a nivel de pipitilla. Desmerece pese al escándalo que han realizado, será una más de los cinco consejeros y una que arrastra un desprestigio social bien ganado por años de abusos y arbitrariedades, impidiendo con el uso de la fuerza la ejecución de resoluciones judiciales.

Javier Corral, tarde o temprano, recibirá la factura social por su compromiso con Luz Estela. Seguro tiene plena conciencia de lo que implica, incluso dentro de su partido, una imposición tan cuestionada. Son amigos, la lleva en lo más profundo de su corazón, eso también es digno de reconocimiento, entiende que al amigo se le reconoce en la nómina.

No me quieras tanto compadre, debió pensar Reyes Baeza cuando Peña Nieto lo eligió para ser su representante político en Tabasco y Campeche, tierras de Andrés Manuel López Obrador ¿Y eso es bueno o es malo? Se preguntaría Artemio Iglesias.

Bueno por que le dan una tarea con responsabilidad electoral, contener hasta donde pueda el impulso del “Coco” en su propia casa, lo cual evidentemente significa que le reconocen su capacidad operativa; malo por que lo dejan en la cueva del lobo y hágale como pueda, pero entregue resultados.

De cualquier forma es una excelente oportunidad para que Reyes muestre oficio y se congracie con el grupo que toma las decisiones políticas en éste país. Sólo por si remotamente llegase a ofrecerse en un futuro próximo, pues ya ve como trabajan por amor al país, jamás mirando su futuro político. Ajá.

Con más de representantes políticos, apunte otro dato positivo para el director del ISSSTE. Con la misma cachucha viene a Chihuahua José Antonio Narro, Secretario de Salud con el que Reyes ha fortalecido una relación personal estrecha. Narro es cada vez más visto como prospecto posible a presidente de la República.

Siempre es bueno andar en el baile y más cuando vas acompañado de una palomilla que te es afín. En esas anda Reyes desde semanas atrás, a ver como la va con sus quince municipios en el Estado de México, donde la elección es un volado. Habrá tiempo para valorar los resultados.

Un prudente paso de costado mostró Armando Cabada, con el proyecto de Juárez Iluminado. El lunes envió un oficio al Congreso, informando que retira de la mesa su solicitud para ser votada.

En palabras de del barrio su retirada es interpretable como un “más vale aquí corrió que aquí murió”. Aunque ayer declaró que el proyecto “estaba más vivo que nunca, explicando que sólo requiere recibir aire, darse más espacio. O sea una especie de no, pero quién sabe, sin embargo puede ser. Sí, lo dejó muy claro.

Muy cuesta arriba ese proyecto desde que inició y cuando empezaron a manosearlo puso en franca vulnerabilidad al edil juarense –al jefe de la comuna, como gustan llamarle allá- que de insistir movería a sospechas sobre intereses de otro tipo, más allá de la urgente necesidad de iluminar esa ciudad.

Detenerlos es lo mejor que pudo hacer, proyectos de ese tamaño suelen traer más problemas que beneficios, pregúntenle a Eugenio Baeza. Tenía un similar para Chihuahua y en cuanto regresó Garfio lo reventó, pues prevalecía la idea de que intentaba beneficiarse vendiendo al municipio energía generada por las empresas de Bafar. Ya sabe Cabada, no se puede hacer todo lo que uno quiera, ni siendo el vicegobernador de la “Hermana República de Juárez”